APUKUNAQ TIANAN: LA MORADA DE LOS DIOSES
Apukunaq Tianan, mejor conocido como «La Morada de los Dioses» se ha convertido en un nuevo atractivo turístico en Cusco, lleno de leyendas y enigmas. Fue elaborada por el artista Michael Monteagudo Mejía, se trata de un nuevo conjunto de monumentos líticos en la ciudad del Cusco, que busca revalorar la cultura e identidad y a su vez brindar homenaje a la ideología andina con los bellos monumentos hechos en piedra.
Las esculturas alcanzan alturas de hasta 17 metros, se encuentra a solo 12 kilómetros de la ciudad del Cusco. En el lugar existen monumentos esculpidos en piedra de los símbolos y figuras más representativos de la cultura inca.
No es un sitio arqueológico. En realidad solo era un terreno baldío donde proliferaba la piedra. Durante la construcción algunas de las personas que laboraban, vieron seres misticos llamados o conocidos como mukis o duendes, quienes hicieron su aparición y reclamaron también ser parte de ese trabajo, ya que seria una manera de adoración a la Pachamama (Madre tierra). Por lo que, aún queda pendiente realizar algunas obras representativas para los dueños de esta tierra virgen, ubicado en la entrada principal de Cusco, El Arco de Tica Tica.
Estos son algunas de las obras de arte del lugar:
- El puma: Este animal fue venerado por varias culturas andinas. Los incas lo consideraban como símbolo del mundo terrenal, también llamado kaypacha.
- La pachamama: Este nombre quechua hace referencia a la tierra, fuente de alimento y, por consiguiente, vida para los hombres. Para los incas, la pachamama era una diosa a la que había que agradecerle mediante rituales de ‘pago a la tierra’.
- La puerta tridimensional: Esta obra representa una entrada dentro de la formación de piedra, similar a una cueva. Para los incas, las cuevas comunicaban el mundo de los vivos (kaypacha) con el mundo de los muertos (ukupacha).
- El hombre andino: El hombre, según la cosmovisión inca, fue creado por el sol. El primer hijo del sol fue Manco Cápac quien lideró a la tribu inca hacia el valle del Cusco donde se fundaría el imperio más grande de Sudamérica.
- El hombre de la selva: No hay evidencias de que los incas hayan ingresado en la profunda llanura de la selva. Aun así, el comercio entre incas y pobladores selváticos fue constante. La misteriosa selva fue fuente de productos como la hoja de coca.
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